En Cochabamba, los niveles de asentamiento humano, es impresionante debido al éxodo de familias del área rural que llegan a la ciudad en busca de mejores oportunidades frente a la carencia de políticas que permitan mejorar  las condiciones de vida de la población. En varias regiones del área rural de Cochabamba, hay pueblos fantasmas, todos se fueron, porque ya no hay vida.

En el área rural, especialmente  en la zona andina y los valles, puedes observar desolación, melancolía, soledad, penuria y abandono de tierras agrícolas por la carencia de inversiones en el área productiva.

No hay sistemas de riego, no existe electrificación, no se tiene los servicios de agua potable y alcantarillado, los caminos son un desastre.

No existe un plan de apoyo al sector productivo, frente a esta grave situación social, la gente se ve obligada a migrar a las ciudades y en otros casos se van a Chile, Europa incluso Estados Unidos.

Los migrantes del área rural, ha fijado su horizonte en la ciudad de Cochabamba, donde, pese a la crisis económica se asentaron en la zona Sud, donde encontraron un pedazo de tierra para sobrevivir de alguna actividad económica.

La zona Sud de Cochabamba, se ha convertido en una nueva ciudad, donde las necesidades de las familias son diversas y presionan a la alcaldía municipal para atender sus problemas, llegando en muchos casos a acciones de protesta contra las autoridades municipales.

El alcalde municipal, Manfred Reyes Villa dijo: “me preocupa el crecimiento urbano de la ciudad, hay muchos asentamientos donde lograron unirse en mancomunidades para demandar obras.

SIGUE: Como autoridad tengo la responsabilidad de atender de forma solidaria, oportuna y sin discriminación, sin ver colores políticos o que sean familias migrantes. Yo estoy más cerca del pueblo y conozco las necesidades que tienen, apunto.

Pese a las dificultades de orden económico, por la deuda de más de 500 millones de bolivianos que heredamos de anteriores gestiones, estamos trabajando en la dotación de agua potable, en construcción de sistemas de alcantarillado, estamos atendiendo los servicios de salud y educación, se trabaja en el mejoramiento de la infraestructura urbana construcción de caminos asfaltados, puentes e iluminación, asevero.

“Tenemos que construir una nueva ciudad, donde todos los habitantes tengan mejores condiciones para vivir mejor. Necesitamos inversiones, necesitamos gente emprendedora que ayude a la reactividad económica. La gastronomía y el turismo deberían ser la nueva alternativa para salir de la actual crisis”, menciono. (FAUSTO COLPARI)