Viernes, 29 Marzo 2024
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Gestiones urgentes del Gobierno de Bolivia en busca de evitar un paro en Santa Cruz

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El departamento boliviano de Santa Cruz iniciará mañana un paro por tiempo indefinido con cortes de calles y rutas en reclamo de que el Gobierno nacional haga el censo en 2023 y no en 2024, como lo tiene planeado, en lo que representará una nueva pulseada entre esa región, bastión de la oposición, y el Ejecutivo del presidente Luis Arce.

La medida llegaba precedida de ásperos cruces entre las partes, que se acusaban de no aceptar el diálogo, y con la amenaza latente de hechos de violencia, porque varios sectores del oficialismo anticiparon que buscarán desbloquear las calles que sean cortadas.

Pro a última hora apareció una chance de negociaciones, según dejaron entrever autoridades cívicas cruceñas, por lo que la medida entraba en una zona de incertidumbre.

El presidente del Comité Cívico pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, afirmó que hubo “acercamientos” con el Gobierno para ver si se podía dejar sin efecto el paro indefinido, y su segundo, Fernando Larach, habló de “canales de diálogo” con el Ejecutivo.

“Esperamos que haya resultados positivos para la población. Al haber canales de diálogo quiere decir que han habido ciertos acercamientos, pero nosotros no podemos tener una respuesta total. Vamos a cumplir con lo que se dictaminó en el cabildo y en las diferentes asambleas de los otros departamentos”, manifestó Calvo.

El gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) llamó a su militancia a estar desde mañana en Santa Cruz para participar de forma "pacífica" en el desbloqueo de los piquetes, aunque esta misma tarde realizó un “cabildo abierto” en la ciudad capital para mostrar fuerza a horas del inicio del paro.

En un comunicado, instó a estos equipos de negociación a hacer "prevalecer siempre la amabilidad y la educación" si surgen confrontaciones.

Con todo, el oficialismo volvió a acusar de “golpistas" al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, y a Calvo.

El Gobierno de Bolivia decidió aplazar hasta 2024 el censo poblacional previsto en un primer momento para el primer semestre de 2023 con el argumento de que no se dan las condiciones idóneas para llevarlo a cabo por una serie de deficiencias técnicas y logísticas como parte de las consecuencias de la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, Camacho, una de las piezas clave de la crisis que derivó en el golpe contra Evo Morales tras las elecciones de 2019, considera ilegal esa postergación, porque el censo debe realizarse cada diez años, y las anteriores estadísticas, de 2012, no son fiables para redistribuir los presupuestos federales.

El Comité Cívico, un conglomerado civil y empresarial, urgió al Ejecutivo a que apruebe un decreto para hacer el censo el próximo año, para actualizar la distribución de bancas en el Congreso y la asignación de recursos económicos públicos por población.

El vicepresidente del MAS, Gerardo García, advirtió que el Comité Cívico cruceño “ha estado amenazando que con los muertos serán responsabilidad del Gobierno y eso es ya una anticipación de ellos, incluso de que están preparados hasta para matar, porque hablar de muertos es otra cosa".

Senadores y diputados del opositor Creemos, en tanto, denunciaron en un comunicado que el MAS trasladó “de forma obligatoria a funcionarios públicos” a una concentración que buscaba “amedrentar y generar violencia contra los ciudadanos cruceños” que desarrollarán el paro cívico desde mañana.

“Esta convocatoria realizada por el MAS no es más que un mitin político partidario con la intención de generar violencia, caos, enfrentamientos y zozobra en el pueblo cruceño que por mandato del cabildo del 30 de septiembre de 2022 ha decido instalar un paro cívico indefinido exigiendo la abrogación del DS 4760 y la realización del Censo de Población y Vivienda en la gestión 2023”, señala el comunicado.

En su cuenta de la red Twitter, el expresidente Morales insistió en que “el diálogo es el camino”. “Nuestro gobierno ha invitado permanentemente al diálogo, pero la derecha golpista usa las causas regionalistas, desinforma y usa la fecha del censo para provocar y rearticularse. Debe imponerse el diálogo de buena fe”, agregó.

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