Bolivia vive una crisis diplomática sin precedentes, impactando en el comercio y en las condiciones de vida de sus habitantes.

Bolivia se encuentra en medio de una grave crisis en sus relaciones diplomáticas, considerada la peor desde el retorno de la democracia.

Esto ha tenido un impacto significativo en el comercio del país, generando consecuencias como la escasez de alimentos, el aumento de personas sin vivienda propia y la dificultad para encontrar empleo tanto en Bolivia como en los países vecinos.

Estas dificultades se deben a acusaciones y posturas ideológicas que han obstaculizado las relaciones diplomáticas.

Según el senador de Comunidad Ciudadana (CC), Rodrigo Paz, el Gobierno actual está perjudicando el desarrollo comercial de Bolivia al priorizar compromisos ideológicos con Rusia e Irán por encima de las necesidades de los bolivianos.

Esta situación ha llevado a un deterioro en las relaciones con países vecinos como Chile y Argentina, quienes han mostrado susceptibilidades debido a la relación de Bolivia con Irán. Estas tensiones podrían resultar en un distanciamiento que afectaría gravemente a la población boliviana.

En medio de la controversia, el presidente Luis Arce mencionó durante un evento en La Paz que un país vecino está tratando de apropiarse de los recursos bolivianos, especialmente el litio.

Aunque no mencionó directamente el nombre del país, se puede inferir que se refiere a Chile, haciendo referencia al Tratado de 1904.

Arce afirmó que esta supuesta intención busca desestabilizar a Bolivia y mostrarla como un Estado fallido con el fin de apoderarse de sus recursos naturales.