La Cámara Automotor Boliviana (CAB) esclarece que ingresaron a Bolivia un promedio de casi 120.000 autos chutos anualmente.
De acuerdo a un reportaje en Bolivia circulan al menos 1,4 millones de autos indocumentados.
El gerente de la CAB, Luis Orlando Encinas, sostuvo que “por la zona de extensión aduanera que es Tarapacá y Parinacota, que es es la frontera en el desierto entre Chile y Bolivia, entran 120 mil autos por año. Los últimos nueve años se han reunido alrededor de 1,4 millones de vehículos ‘chutos’”.
En Facebook hay varias páginas que ofertan la venta de estos vehículos. Incluso ofrecen traer coches a pedido: “Autos chutos Batallas, Achacachi, Ancoraimes”, “Autos chutos Challapata”, “Autos chutos Patacamaya o Konani, Yungas”.
La venta de los autos indocumentados, denominado chutos, se caracteriza por la importación de vehículos nuevos y usados, de países como Japón, China, Francia y otros, que ingresan a Bolivia sin papeles y sin cumplir con los requisitos legales ni pagar impuestos ni importación, se explica en el reportaje.
Al no contar con la documentación adecuada, los autos son comercializados de manera clandestina a precios más bajos que los de los vehículos importados legalmente.
Este problema también impacta a la economía de Bolivia. Este tráfico de autos afecta directamente al evadir el pago de impuestos. Las autoridades dejan de recibir millones de dólares anualmente en concepto de impuestos de importación que corresponden a los vehículos que ingresan de manera regular.
A su vez, las empresas legales se ven afectadas, ya que no pueden competir con los precios bajos de los autos indocumentados.