La expresidenta transitoria Jeanine Áñez tildó este viernes, en la audiencia dentro del caso “Golpe II”, de cobarde a los entonces presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, y presidente del Diputados, Víctor Borda, porque evitaron asumir la Presidencia durante la convulsión social en la crisis política de 2019.
“¿Por qué no asumió Adriana Salvatierra o Víctor Borda? Por cobardes no asumieron la Presidencia porque el país estaba en llamas”, manifestó en su declaración que se realiza en el penal de Miraflores de manera presencial y virtual.
El calificativo de Añez también alcanzó a otras exautoridades del Legislativo que no asumieron responsabilidad porque sabían de la convulsión social, producto de la fuga y vació de poder que dejó el expresidente Evo Morales, luego de que la Organización de Estados Americanos emita un informe con irregularidades y vicios de fraude en las elecciones presidenciales de ese año.
“Yo no sé en qué momento (...) En todos los medios de comunicación salió que mi nombre podría ser la que asuma la Presidencia y tuve que hacerlo porque había que darle tranquilidad al país y certidumbre porque los hechos de violencia habían rebasado la Policía y cuando llegamos a la Cámara de Senadores, todos asumían que yo podía ser la sucesora porque todos habían renunciado y renunciaron por cobardes”, manifestó.
La exmandataria descartó la versión de la gesta de un golpe de Estado para asumir la Presidencia en la crisis y resaltó que, de ser así, no hubiera existido una Asamblea Legislativa en funciones con mayoría oficialista.
"No tenía voz ni voto ni en mi partido, menos voy a tener el contacto de militares (…) No pueden decir que (el supuesto golpe) fue orquestado, yo fui una consecuencia de la convulsión", aseguró.
Áñez recalcó que su llegada a la Presidencia fue por responsabilidad para tranquilizar a un país que vivía un caos social y conducir a unas nuevas elecciones generales en tres meses, pero las circunstancias de la pandemia no lo permitieron.
La principal acusada dentro del caso Golpe II explicó al tribunal que el inicio de todo el conflicto tiene que ver con Evo Morales y la violación a la Constitución respecto al límite de repostulaciones que establece.
En este proceso, se la juzga por los delitos de resoluciones contrarias a la ley e incumplimiento de deberes, que están relacionados con sus actos previos a la asunción al poder en 2019.