El gobierno de Bolivia informó ayer el hallazgo de 40.000 municiones, de un total de 70.000, enviadas irregularmente a dicho país durante la gestión de Mauricio Macri en los días en los que se produjo el golpe de Estado contra el expresidente boliviano Evo Morales, hecho que es investigado por la Justicia argentina como presunto contrabando.

El hallazgo lo confirmó el embajador argentino en Bolivia, Ariel Basteiro, quien detalló que se trata de 40.000 municiones que estaban en poder de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), que se suman a las 26.900 halladas el año pasado en manos de la Policía de ese país, de un total de 70.000 enviadas por el gobierno de Cambiemos en noviembre de 2019.

“Esto confirma la totalidad de la prueba del delito. Las municiones halladas refuerzan la denuncia por contrabando”, indicó ­Basteiro.

A su vez, se investigan “reuniones de la embajada argentina (durante el gobierno de Cambiemos) con otras embajadas en las que se hablaba de preparar el terreno para que se avanzara en un golpe” contra Morales.

Fuentes judiciales consideraron que se trata de un “avance significativo para la investigación” y remarcaron que, aunque la respuesta no es completa, despeja interrogantes que existían sobre el destino de los pertrechos.

El gobierno boliviano de Luis Arce halló las balas antitumulto que se entregaron a la Fuerza Aérea Boliviana en la madrugada del 13 de noviembre de 2019 y que habían sido distribuidas “en diferentes cuarteles y organismos” de la FAB. El hallazgo de las municiones es parte de un exhorto que la Justicia de Bolivia envió a la Argentina.