Martes, 22 Octubre 2024
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Áñez fue trasladada de emergencia a un centro médico en Bolivia, dicen que su estado de salud es grave

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La expresidenta de Bolivia Jeanine Áñez, fue trasladada de emergencia a un centro médico para una revisión que no tomó más de dos horas, confirmaron fuentes oficiales.

La exmandataria, quien se encuentra encarcelada en el Centro Penitenciario Femenino “Miraflores” de La Paz, fue llevada este miércoles al Hospital del Tórax de la capital boliviana a las 12 del mediodía.

De acuerdo con la tarjeta de salud a través de la cual se autorizó su traslado a una clínica debió ser llevada al centro asistencial para realizarle una “valoración cardiológica”.

En la tarjeta de autorización se ordenó, adicionalmente, que una vez que concluya la valoración médica, la exmandataria de facto “deberá retornar” al Centro Penitenciario Femenino “Miraflores”.

La Mandataria afirmó que Morales propone "el camino de la división y la violencia entre los bolivianos como lo han hecho durante 14 años" de gobierno (2006-2019).

Se informó que hacia las dos de la tarde, Áñez retornó a la cárcel de “Miraflores” en una ambulancia.

Como se recuerda, en la víspera, el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) recomendó que un hospital de tercer nivel realizase una valoración externa a Áñez, después de que un médico confirmó que la exmandataria tenía “hipertensión arterial sistemática bajo tratamiento”.

A comienzos de este mes, la Justicia de Bolivia amplió por otros seis meses la prisión preventiva de la expresidenta de facto de Bolivia Jeanine Áñez, acusada por sedición y terrorismo en el marco del golpe de Estado contra Evo Morales, en noviembre de 2019.

La exsenadora de centroderecha solicitó hace unas semanas una audiencia con la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, para denunciar que se encuentra detenida “por una decisión política” del actual Gobierno.

La expresidenta boliviana ha insistido en que no ha cometido “ningún delito”, y que su detención y múltiples causas judiciales se deben a una “persecución” política.

La exmandataria, a través de su cuenta de Twitter, se refirió a la decisión de la justicia de su país: “Dividen un proceso para prolongar la detención de #JeanineAñez. Imponen en audiencia cautelar otros 6 meses más de injusta privación de libertad, violando los derechos humanos y las garantías. Sin Justicia en #Bolivia no hay democracia”.

Jeanine Áñez fue detenida el pasado 13 de marzo y fue imputada por los delitos de terrorismo, sedición y conspiración, por los hechos de noviembre de 2019, que terminaron con un golpe de Estado contra Evo Morales y la imposición de un régimen de facto.

Actualmente, se encuentra bajo prisión preventiva en la cárcel de Obrajes, La Paz, en espera del juicio. La semana pasada, al cumplirse cuatro meses de su detención, los familiares de la expresidenta autoproclamada denunciaron que la justicia volvió a negarle su derecho a la libertad. Sin embargo, la prisión preventiva fue extendida dos meses más.

Por otra parte, Áñez enfrenta cuatro juicios de responsabilidades por diversos delitos planteados por el actual Gobierno de Arce.

 “Instamos al gobierno boliviano a dejar en claro su apoyo a la paz, la democracia y la reconciliación nacional con la liberación de los exjerarcas detenidos”, dijo el secretario de Estado.

Estados Unidos reclamó la liberación de figuras del antiguo gobierno interino de Bolivia, detenidas y procesadas desde mediados de marzo, entre ellas la expresidenta interina Jeanine Áñez, por un supuesto golpe de Estado contra el expresidente Evo Morales.

“Instamos al gobierno boliviano a dejar en claro su apoyo a la paz, la democracia y la reconciliación nacional con la liberación de los exjerarcas detenidos”, dijo el secretario de Estado, Antony Blinken, en un comunicado.

El jefe de la diplomacia estadounidense también expresó la “profunda preocupación” de Estados Unidos por “las crecientes señales antidemocráticas y la politización del sistema judicial en Bolivia”.

Áñez sumó en marzo pasado cuatro acusaciones por actos inconstitucionales durante su mandato.

Los cargos fueron presentados por el Ministerio de Justicia en nombre del Estado y la Fiscalía aceptó investigarlos para el periodo en que Áñez ejerció como presidenta. Áñez fue inicialmente acusada de los delitos de sedición, terrorismo y conspiración.

Se le sumaron acusaciones por firmar “resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes, incumplimiento de deberes, delitos contra la salud pública y discriminación”, destacó el secretario general de la Fiscalía, Edwin Quispe.

Estas acusaciones abren dos frentes para la defensa de la exmandataria, de 53 años, por orden de la Fiscalía tras ser denunciada por la exdiputada oficialista del Movimiento Al Socialismo (MAS, izquierda).

También fueron aprehendidos sus exministros de Justicia y Energía y pesan órdenes de detención contra otras personalidades, como el líder cívico de la rica región de Santa Cruz, el derechista Luis Fernando Camacho, gobernador electo de ese departamento, además de altos cargos militares y policiales.

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