Desde Cochabamba, trabajadores de base de Obras Publicas dependiente de la alcaldía municipal denunciaron que los dirigentes Julián Rocha y Hugo Nogales acaparan la dirección sindical desde hace 35 años y tienen jugosos sueldos que sobrepasan los 10 mil bolivianos cada mes.
No solo se eternizaron en la dirección sindical, sino que se dedicaron a extorsionar, chantajear y obligar bajo amenazas a seguir respaldo en los cargos sindicales, hecho que fue denunciado a través de la carta que circula en las redes sociales.
Otra de las maniobras de los “dirigentes vitalicios” es que sus hijos ocupan importantes puestos en las empresas descentralizadas y son considerados “los capos del sindicalismo”.
Los eternos dirigentes colocaron en puestos estratégicos a sus hijos, tíos, sobrinos, amigas y otros que nunca fueron esclarecidos. Otros dirigentes que gozan de poder son Gerardo Chávez, Vicente Córdova, Wilfredo Fernández y otros
Estos mismos dirigentes que no quieren “soltar la mamadera” cometieron excesos y abusos, al presionar a las autoridades que contraten gente con libretas falsificadas y los peor de eso que hasta la fecha no se esclarecido el robo de combustible.
Los trabajadores de base señalan: “estos dirigentes corruptos, están preparando una asamblea para supuestamente nombrar un dirigencia genuina, cuando en el fondo se está buscando la reelección por aclamación, hecho totalmente irregular que debe conocer la opinión pública, se menciona.
Basta de dirigentes vitalicios, queremos dirigencia con gente nueva y que responda a los intereses de defensa de los trabajadores y no pecar en actos de corrupción y nepotismo, afirman los trabajadores de base.