Varias instituciones de Quillacollo, exigen la protección y conservación patrimonial de la plaza “15 de Agosto” que se constituye en el nuevo rostro de recogimiento espiritual y tiene un carácter cultural, religioso y cultural.
“No podemos devastar el patrimonio histórico de Quillacollo permitiendo el ingreso de comerciantes y otros otros factores que perturben la condición de área espiritual”, señala un comunicado de instituciones.
Se rercordo que la Plaza Principal a lo largo de los años fue un lugar de reuniones, celebraciones religiosas, vecinales y centro de cohesión social.
Las obras de remodelación deben recuperar este espacio para los vecinos, visitantes, turistas y fieles, ya que será de uso casi exclusivo para el recogimiento espiritual, la amable tertulia, lugar de encuentros y reencuentros familiares y de amistad.
Sin embargo se requiere planes y proyectos de recuperación y jerarquización del centro histórico, especialmente de los alrededores del templo de San Ildefonso, que tiene categoría de Monumento Nacional.
Algunos grupos sociales pretenden distorsionar el nuevo rumbo que tomara la plaza principal, donde miles de feligreses llegan para venerar a la Virgen de Urkupiña.
El secretario municipal General, Gilmar López, sostuvo que el proyecto fue elaborado por el Colegio de Arquitectos respetando el patrimonio cultural del sector.
López añadió que se encuentran “indignados” por las decisiones determinadas por la Asociación de Fraternos de no participar en el lanzamiento oficial de la Festividad Virgen de Urkupiña 2024.
Aclaró que el patrimonio es protegido por la ley municipal 720/2024, que prohíbe la circulación vehicular y el asentamiento de comerciantes.
La nueva plaza 15 de Agosto presenta una imagen moderna, peatonal y amplia. La Alcaldía de Quillacollo entregó,hace do días, este espacio remozado con miras a la festividad de la Virgen de Urkupiña.
Los trabajos de remodelación incluyen un contrapiso de hormigón, revestimiento de piso baldosa, implementación de bancas, implementación de jardineras, cambio de iluminación de última generación (luces led), con cableado subterráneo, implementación de bancas de granito, mejoramiento de área verde, mejoramiento y mantenimiento de la glorieta, implementación de faldones fundidos, implementación de sistema de riego por aspersión e implementación de desagües pluviales.
El proyecto tuvo un costo de más de 3 millones de bolivianos (3.139.127 bolivianos), informó el municipio mediante una nota de prensa.
A través de la ley autónoma municipal 720/2024, se establece su uso, preservación, conservación y conversión peatonal, por lo que se consolida el cierre del acceso al tráfico vehicular y se prohíbe el asentamiento de comerciantes y otros negocios ajenos a su condición patrimonial.