El viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y del Consumidor, Jorge Silva Trujillo, verificó la venta normal de carne en el mercado Rodríguez de La Paz, tras el anuncio de un paro indefinido por parte de la Confederación Nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (Contracabol). Controles similares en otras ciudades del país también confirmaron el abastecimiento continuo de productos de primera necesidad.
"Hemos constatado la preocupación de los vendedores y consumidores por el alza de precios y la calidad de la carne. Sin embargo, cerrar mercados no es la solución, ya que vulnera el derecho a la alimentación de la población. Exhortamos a la dirigencia a reflexionar y sumarse a las mesas de trabajo que hemos conformado para abordar este problema", afirmó Silva.
El viceministro destacó que, pese al paro, la mayoría de los comercios siguen operando con normalidad. No obstante, reconoció que la medida de presión afecta a la población al limitar el acceso a un producto esencial.
Silva recordó que el Gobierno ha iniciado mesas técnicas con actores clave de la cadena cárnica —ganaderos, frigoríficos y exportadores— para analizar las causas del aumento de precios y la disminución en la calidad del producto.
Asimismo, anunció una reunión con la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz) programada para este martes 19 de noviembre, donde se discutirán soluciones y ajustes al precio del kilo gancho.
Durante un diálogo directo con el viceministro, los vendedores al detalle de carne de res manifestaron su descontento con la calidad de la carne. Señalaron que los productos ofertados contienen altos porcentajes de grasa y huesos, afectando tanto las ventas como la satisfacción del consumidor final. Además, indicaron que el alto costo de la carne ha reducido significativamente el poder adquisitivo de las familias bolivianas.
Silva reiteró que las acciones del Viceministerio están orientadas a proteger los derechos de las y los consumidores, garantizando el acceso a alimentos esenciales en condiciones justas. Además, hizo un llamado a la calma y al diálogo como mecanismos para superar esta coyuntura.
"Garantizar el abastecimiento de carne de calidad a un precio justo es una prioridad para el Gobierno; estamos trabajando en soluciones conjuntas que beneficien tanto a los consumidores como a los trabajadores del sector cárnico", subrayó Silva.
Finalmente, reafirmó el compromiso del Gobierno de proteger los derechos de los consumidores, garantizar el acceso a alimentos esenciales y fomentar el diálogo como herramienta para resolver esta coyuntura.