Este viernes en Cotapachi, en el municipio Quillacollo se registraron violentos enfrentamientos entre comunarios y presuntos loteadores, dejando un saldo de varios heridos, entre ellos algunos de bala, según reportes preliminares.

“Los loteadores bien armados nos han invadido allí arriba. Nosotros los hemos ido a desalojar a ellos y ahí nos han invadido con armas de fuego. A nuestros compañeros los han herido, a mi cuñado le han roto las piernas”, relató uno de los comunarios de Cotapachi, en puertas de un centro médico al cual fue evacuado su familiar.

De acuerdo a un reporte preliminar, los afectados por impactos de bala superan los cinco. Todos, comunarios.

“En este momento estamos constatando que ha ingresado un herido en la pierna izquierda, armas de fuego, balas contundentes. Pedimos a la Fiscalía que en este momento vaya e intervenga. Están ahí, hay varios, hay retroexcavadoras, estaban llevando ladrillo, estaban haciendo construcciones los loteadores (…) No son de la zona, están armados hasta los dientes. A los pobres comunarios les han dado a tiros”, relató una fuente informativa.

La situación es tensa en la zona de conflicto. Al momento, grandes columnas de humo negro se desprenden de los cerros de Cotapachi, mientras varios comunarios instalaron una vigilia a los pies de los mismos.

Los comunarios de Cotapachi instalaron bloqueos y una vigilia este viernes tras el ataque armado que sufrieron de parte de los avasalladores que desde el lunes pretendían abrir caminos ilegales y levantar construcciones irregulares.

El conflicto se registró poco antes del mediodía con disparos de arma de fuego tipo 9 mm y 7,62 armas largas de parte de los avasalladores contra los comunarios que protegían sus tierras de pastoreo y agrícolas en el extremo sur de Quillacollo, detrás de las qollqas o silos incaicos.

Ante la violencia desmedida contra los pobladores, un contingente policial acudió al sector, al igual, que funcionarios de la Alcaldía de Quillacollo para detener a los invasores y demoler las construcciones ilegales.

Los afectados además quemaron los autos de los avasalladores y un tractor y varias carpas. Se estima que hay al menos cinco heridos de bala y seis detenidos.