“Ya no podemos seguir tolerando lo vivido estos últimos 20 años: la corrupción, extorsión, abusos y contrabando. Hoy dejamos atrás una etapa oscura”. Ese fue el compromiso del nuevo presidente de la Aduana Nacional de Bolivia, Alberto Samuel Soto, al asumir el cargo este martes.
Asimismo, Soto manifestó que en su gestión es obligatorio desarrollar una “limpieza, reestructuración y modernización de la Aduana”.
Sin embargo, dijo que esto no alcanza, si no también se debe cambiar la mentalidad del servidor público, que no debe aprovecharse de su cargo.
“El que quiera aprovecharse de sus funciones que se atenga a las consecuencias”, advirtió.
Se comprometió a colocar a Bolivia en un escenario internacional facilitando el comercio exterior y destrabar el Estado tranca, con apertura para importadores y exportadores.



