Miércoles, 14 Mayo 2025
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Carencia de lluvias causa problemas ambientales en la Laguna Alalay

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La prolongada sequía que afecta a gran parte de Bolivia, en particular a Cochabamba, causa estragos en la producción agropecuaria y ocasiona problemas ambientales en la Laguna Alalay uno de los espejos de agua más importantes del área urbana.

“Si no hay lluvia, es casi imposible, controlar los severos problemas que se registran en la Laguna Alalay. Tenemos que rogar a San Severino para que nos de lluvias. La alcaldía municipal de Cochabamba, realiza todos los esfuerzo necesarios para controlar un posible desastre ambiental”, aseveró el director de Medio Ambiente, Elvis Gutiérrez.

En Cochabamba, existe una organización denominada Comité de Protección de la laguna Alalay (Crempla), conformada por el Ministerio de Medio Ambiente, la Gobernación, alcaldía municipal de Cochabamba y la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) que tienen la responsabilidad de fijar un plan para cuidar y proteger la Laguna Alalay y aportar recursos para su recuperación, pero lamentable esta  estructura oficinesca nada hace para salvar el único espejo de agua existente en el área urbana.

Varias organizaciones ambientalistas de Cochabamba, protestaron contra el Ministerio de Medio Ambiente que hasta la fecha no movió un solo hilo para contribuir con plan que permita salvar la Laguna Alalay que corre el riesgo de extinguirse debido a diversos factores, entre ellos la prolongada sequía y la carencia de lluvias.

La Alcaldía de Cochabamba trabaja en la mitigación de los malos olores de la Laguna Alalay; sin embargo, la escasa lluvia no permite diluir  la concentración de agua contaminada que provoca malos olores en el espejo de agua del municipio.

“Lamentablemente la lluvia no ayudó, esperamos que se intensifique para que ingrese a la laguna y pueda diluir la concentración de agua contaminada que está afectando con los malos olores especialmente a los vecinos”, señaló el Director de Medio Ambiente, Elvis Gutiérrez.

La Laguna Alalay es un vaso regulador que depende de la lluvia, en ello, radica la importancia de las precipitaciones que hasta la fecha han sido muy escasas; asimismo, tampoco ingresa agua del Río Maylanco que también la alimenta.

“Este año ha sido muy crítico porque no tuvimos buenas lluvias (…) Cuando llegan precipitaciones pluviales hacemos la medición; sin embargo, la situación es crítica  no solo acá sino a nivel nacional”, añadió Gutiérrez.

La Dirección de Medio Ambiente continúa con el encapsulamiento de lodos y fumigación que responden a las denuncias de vecinos que, señalaron que hay un incremento alarmante de moscas en la zona.

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