Miles de feligreses se congregaron en las iglesias de todo el país para recordar el viacrucis y la pasión de Cristo en el Viernes Santo.
En Santa Cruz, la población se reunió en el atrio de la catedral para celebrar la pasión del Señor según la lectura de San Juan, seguida de una procesión por las calles del centro de la ciudad.
Las autoridades locales, incluyendo al gobernador en suplencia Mario Aguilera y al presidente del Comité Pro Santa Cruz, Fernando Larach, también participaron en la celebración.
Monseñor René Leigue, arzobispo de Santa Cruz, aprovechó la ocasión para reflexionar sobre el estado de la justicia en el país, haciendo referencia a la situación de los presos inocentes.
"Hoy vemos a muchos inocentes en las cárceles, pero también hay algunos que seguro merecen estar privados de libertad, porque no han hecho bien las cosas, no han cumplido con aquello que les toca hacer", mencionó el arzobispo.
"La mentira se campea en nuestra sociedad, en medio de nosotros, cuántos caemos también en la mentira, o a lo mejor se dice la verdad, pero no se le cree a esa persona", agregó.
Para resguardar la seguridad de los feligreses, desde la Alcaldía Municipal determinaron cerrar varias calles.
La celebración del Viernes Santo es un momento de profunda reflexión para los católicos, que rememoran la muerte de Jesús en la cruz y su posterior resurrección. El viacrucis, que representa el camino de Jesús hacia su crucifixión, es una tradición que se lleva a cabo en muchas ciudades y pueblos de Bolivia.