El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció el último lunes que las Fuerzas Armadas serán desplegadas en la frontera con Perú para frenar el contrabando de productos de primera necesidad, como pollo, carne de cerdo y res. Estos alimentos han experimentado una escasez significativa y un alza de precios en los mercados locales que ha provocado el descontento de la ciudadanía.
La decisión del Gobierno de Luis Arce se produjo poco después de una movilización de comerciantes y ciudadanos bolivianos que responsabilizaban a Perú por la crisis de escasez y el aumento de precios de productos como pollo, carne de cerdo y res.
Los manifestantes argumentaron que los ganaderos y distribuidores en Bolivia optan por vender sus productos en el lado peruano debido a que pueden obtener precios más altos, así como la posibilidad de recibir pagos en dólares y soles, lo que resulta más atractivo económicamente.
Como respuesta a esta situación, en los últimos días, grupos de bolivianos han estado presentes en la frontera, bloqueando el paso de estos productos hacia Perú para intentar mitigar el desabastecimiento en su país.
Bolivia atraviesa una crisis económica profunda, resultado de una política energética estatista y nacionalista que ha llevado a la devaluación de su moneda y al desabastecimiento de productos esenciales, incluidos medicamentos.
Esta situación se ha visto agravada por protestas y devastadores incendios forestales que han arrasado miles de hectáreas de cultivos y causado la muerte de numerosos animales.
Desde Desaguadero, un corresponsal de Exitosa Noticias informó que el precio del kilo de pollo en Bolivia es de aproximadamente 15 bolivianos, mientras que en la frontera con Perú alcanza cerca de 18 bolivianos.
Esta diferencia ha llevado a algunos consumidores peruanos a adquirir pollo en el lado boliviano, donde los costos son más bajos.
Asimismo, los distribuidores bolivianos prefieren vender a Perú de contrabando para obtener mejores precios, debido a su precaria situación financiera producto de la devaluación de su moneda.
A pesar de la escasez en los mercados bolivianos, el consumo de productos bolivianos en Perú es limitado, aseguró el corresponsal que radica en el lugar. No obstante, aclaró que esta dinámica de intercambio comercial no es nueva.
A lo largo de los años, tanto peruanos han comprado en Bolivia como bolivianos han cruzado la frontera en busca de productos peruanos, fenómeno que se ha intensificado en los últimos meses debido a la crisis económica boliviana.
Aunque el comercio entre ambos países es activo, las cifras mencionadas en los medios bolivianos son exageradas, asegura. No obstante, reconoció que la vasta extensión de la frontera complica el control del contrabando y del flujo de productos.
“Tanto el boliviano consume del Perú como el peruano también consume algunos productos de Bolivia. Tenemos una frontera extensa. Solamente en el distrito de Desaguadero, estamos hablando de más de 30 kilómetros de frontera con Bolivia. Por ahí, por las partes bajas estarían ingresando estos productos, de repente en mayor cantidad, eso desconocemos. Sin embargo, aquí lo que viene ser la línea frontera, el tema de intercambio comercial es corto, breve, no se da en cantidades como se ha estado mencionando en medios bolivianos”, señaló.
Por su parte, Alex Jerí, representante de la Asociación de Avicultores del Sur del Perú, advirtió que el contrabando de productos de primera necesidad se da entre ambos países y que las acusaciones de los comerciantes bolivianos contra el Perú es totalmente errada. “No es justo que por problemas políticos de ellos (bolivianos), nos culpen a nosotros de algo que no tenemos nada que ver”, sostuvo.
En su caso, la entrada de huevos bolivianos al Perú ha impactado negativamente al comercio peruano, ya que estos productos ingresan sin control sanitario, representando un riesgo para la salud pública. Además, los precios subsidiados en Bolivia crean una competencia desleal que perjudica a los productores peruanos.
“El tema es que el boliviano quiere el sol peruano. La moneda boliviana se ha devaluado de tal manera que ellos no pueden comprar dólares con sus bolivianos, entonces tienen que comprar soles para que puedan comprar dólares”, agregó.