El dirigente de la Federación de gremiales, Enoc Campo, confirmó que muchas personas prefieren comprar dólares con pesos argentinos en la frontera, esto ante la necesidad de efectuar sus importaciones y la escasez que vive Bolivia, lo que está llevando al alza de precios en varios productos que se comercializan en nuestro país.
Ocampo admitió a El Periódico de Tarija, que él mismo vio esta situación y testificó que en la frontera todo es libre, en medio de una profunda informalidad que hasta colinda con la ilegalidad.
“He podido ver en la frontera, en Bermejo, que compran pesos (argentinos) y van a traer dólares de Argentina y después van a Chile a traer ropa para poder negociar en la frontera”, relató el dirigente al admitir que la escasez de dólares en Bolivia, es total.
Ocampo asegura que los comerciantes sí o sí necesitan dólares para poder comprar mercadería y por ello, mucha gente en la frontera se dedica a vender dólares por pesos argentinos, indicó que en los bancos de Argentina se puede comprar con normalidad los dólares a comparación de nuestro país, sin embargo, si se hace el cambio, llega a costar casi lo mismo que en el mercado paralelo en Bolivia, “pero consigues la cantidad que tú quieres” afirmó.
Ante la escasez de dólares en los bancos bolivianos, las personas que se dedican a vender esta divisa en el mercado paralelo, la ofrecen en Bs. 10. Durante los últimos días el precio del dólar fue cotizado por Bs 10.40.
Este incremento de la divisa extranjera ocasiona que muchos productos continúen subiendo, pese a que no sean directos afectados, como en el caso de los cultivos, muchos de estos sectores adquieren materiales o repuestos de maquinarias que ahora llegan con costos elevados, por lo tanto, ellos también deben subir el costo de sus productos.
Ocampo indicó que en la frontera con Argentina todo se maneja de manera informal, no existen controles y que incluso muchos conocen que hay pasos ilegales.
“Ahí van a ver cómo pasan las cosas, no hay control, los que quieren viajar legalmente pasan por Migración, son contados, pero por el otro lado, donde no hay control, son miles los que pasan a diario”, indicó Ocampo Rivero a El Periódico.