La invasión rusa a Ucrania despertó el rechazo de diferentes instancias, países y organismos. A un mes del despliegue de tropas rusas en territorio ucraniano, los embajadores y jefes de misión de naciones europeas en Bolivia emitieron un pronunciamiento en contra de Rusia y su presidente Vladimir Putin.

“Que Rusia ponga fin a la guerra”, titula el comunicado firmado por los embajadores de Alemania, Stefan Duppel; de Canadá, Ralph Jansen; de España, Javier Gassó; de Francia, Hélène Roos; de Italia, Francesco Tafuri; de Japón, Osamu Hokida; de Reino Unido, Jeff Glekin; de Suecia, Nicolas Weeks; y de la Unión Europea, Michael Dóczy; además de la encargada de negocios de Estados Unidos, Charisse Phillips.

En el comunicado, los embajadores y jefes de misión exponen los efectos de la guerra y acusan a Rusia de violar derechos internacionales, incluso advierten que “cualquier país podría invadir y apoderarse del territorio de un vecino más vulnerable, haciendo valer la ley del más fuerte”.

“La invasión rusa de Ucrania tiene un demoledor impacto humanitario y cada día efectos más devastadores. En esto sí hay sólo blanco o negro: hay un agresor, Rusia, y un agredido, Ucrania, que sufre las consecuencias fatales de este acto de barbarie. A nadie convencen las mentiras con las que se ha pretendido justificar la agresión”, señala el documento.

Los diplomáticos apuntan contra el presidente ruso Vladimir Putin por la muerte de civiles y bombardeos de hospitales, escuelas, universidades y viviendas, denunciando los ataques a corredores humanitarios.

“Es fundamental, dado el deterioro de la situación humanitaria y el número de víctimas causadas por la agresión rusa en Ucrania, pedir el cese de las hostilidades, retiro inmediato de las tropas rusas de Ucrania y la protección de los civiles”, señalan, al advertir además que “las consecuencias humanitarias van más allá de Europa”. “El conflicto impacta también a nacionales de países terceros que debemos apoyar sin ninguna discriminación”, enfatizan.

También hacen un repaso de las condenas que recibió la invasión rusa y la orden que emitió la Corte Internacional de Justicia a Rusia de suspender de inmediato sus operaciones militares en Ucrania.

Recuerdan que, “en línea con los esfuerzos de Naciones Unidas”, sus países apoyan, con todos los medios, la protección de la vida y los derechos de las personas.

“Lo que está haciendo el presidente Putin constituye una violación de los principios básicos de la coexistencia humana. El objetivo de su ataque no es sólo Ucrania, sino todo el orden mundial basado en normas, en el sistema de la ONU y el derecho internacional”, agregan los diplomáticos.

Finalmente, afirman que “tras esta guerra el mundo no volverá a ser el mismo” y que “es el momento de levantarse contra el autoritarismo y la opresión”. “La fuerza no da la razón. Nunca lo hizo. Nunca lo hará”, concluyen.