La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) calificó como “un acuerdo político” el incremento salarial anunciado por el presidente Luis Arce tras sostener una reunión con la Central Obrera Boliviana (COB). En ese contexto, el sector advirtió sobre un "efecto muy grave" sobre todo en los pequeños emprendimientos.

Otro aspecto que cuestionó el sector es la "negociación" del haber básico que fijó el Gobierno para el sector privado sobre la base del 3%. Consideran que esa disposición puede generar conflictos y afectaciones a la productividad.

La noche del miércoles el presidente Arce y la dirigencia de la COB anunciaron un incremento al salario mínimo nacional de 4% y 3% de aumento al haber básico sólo para Educación y Salud, en el aparato público.

Tras un análisis interno realizado la mañana de este jueves, "la CEPB alertó que el incremento salarial tendrá un efecto muy grave sobre las empresas, especialmente las mypes, que se evidenciará en pérdida de fuentes de trabajo, informalización y precarización laboral, insostenibilidad económica y financiera y la imposibilidad de realizar nuevas contrataciones e inversiones, 'lo que derivará en problemas sociales, ocasionados por la desocupación y sus secuelas'”, reseña un boletín institucional.

En ese contexto, reclamaron por un presunto "incumplimiento" del Convenio Nº 131 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que dispone la obligación que tiene el Estado de realizar consultas a las representaciones de trabajadores y empleadores antes de decidir sobre el aumento del salario mínimo.

Los privados mencionaron también que en la actual situación de crisis, los niveles de incrementos salariales "impuestos" por el Gobierno "son inadecuados". En ese contexto, puntualizaron que ni el sector público puede permitirse su aplicación a todos los funcionarios del Estado, por lo que tuvo que excluir de su pago al personal dependiente de los Ministerios, Empresas Públicas y la mayoría de entidades del gobierno nacional.

“Esto es, además, una inaceptable discriminación contra el sector privado, sobre todo contra las pequeñas y medianas empresas, así como a aquellas que pertenecen a distintas regiones y rubros productivos, a las que se les obliga a incrementar los salarios, sin ninguna excepción y sin considerar la situación económica que atraviesan”.

El Gobierno confirmó este jueves que el incremento al haber básico será del 3% para el sector privado, y que la negociación entre empleador y trabajador debe hacerse sólo por encima de ese porcentaje.

Al respecto, la patronal boliviana señaló que esta determinación “activa un escenario de discordia que puede generar conflictos, desequilibrios y tensiones, cuyo resultado afectará la gestión de las unidades productivas”.