Durante el régimen de Evo Morales, Cochabamba, soporta la peor humillación y desprecio, donde se ejecutaron obras inservibles y elefantes blancos, ahora los oportunistas quieren volver al pasado, poniendo una serie de obstáculos políticos contra la gestión municipal, señalo el asambleísta, Rodrigo Valdivia.

Las concejalas Daniela Cabrera y Claudia Flores se unieron a los radicales de Evo Morales para perjudicar desarrollo de Cochabamba y boicotear la gestión municipal, tras el acuerdo suscrito con los concejales del ala dura de Evo Morales.

RODRIGO VALDIVIA: “No sabemos cuáles son los acuerdos secretos, pero estamos convencidos que Cochabamba en dos años de gestión, el alcalde Manfred Reyes Villa logro revolucionar el progreso de la Llajta con la atención de las primordiales necesidades de la población”.

SIGUE: En Cochabamba, surge nuevamente una  persecución política contra el desarrollo de Cochabamba, se usa la justicia para castigar y defenestra a líderes regionales que solo buscan la estabilidad institucional. “Algunos concejales que son consideradas enemigos de Cochabamba ahora son sirvientes de Evo Morales. Al MAS de Evo Morales le interesa anular todo lo que implica antimasismo o lo que le haga sombra a Evo Morales”, apunto.

En este momento, al MAS le interesa controlar un municipio grande e importante como el de Cochabamba genera beneficios en todo sentido. Las concejalas Claudia Flores y Daniela Cabrera son inocentes en política y se prestan a un juego sucio en contra de la LLajta.

“Se prestan a que vuelva al pasado, donde se robó al pueblo cochabambino, hubo actos de corrupción, se hicieron malas obras como el puente caído, se malgasto los recursos del municipio, nunca se doto desayuno escolar, nunca se vio una ciudad limpia, nunca llego agua a las zonas marginales, eso es lo que quieren las concejalas que son consideradas desleales a Cochabamba, señalo Valdivia.

El MAS quiere controlar el presupuesto, administrar grandes recursos, toma de decisiones de gestión y posibilidad de dar empleos a la militancia leal.

Y, lo más importante para el MAS, frenar desde el control del poder municipal el ascenso de corrientes opositoras al Gobierno.