David Choquehuanca no se vacunó y no piensa hacerlo, de acuerdo a lo que él mismo manifestó, pese a la presión de distintos sectores en las últimas horas.
Bolivia batió por segundo día consecutivo su récord diario de contagios de COVID-19, con 6.149 nuevos casos reportados este miércoles, en medio de una cuarta ola que azota al país. El último reporte del Ministerio de Salud difundido anoche también da cuenta de 28 decesos que elevaron el total de fallecidos a 19.650, mientras que los contagios acumulados llegan a 591.773 desde marzo de 2020.
Sin embargo, el vicepresidente del país, David Choquehuanca, no se vacunó contra el coronavirus y no piensa hacerlo, de acuerdo a lo que él mismo manifestó, pese a la presión desde distintos sectores en las últimas horas.
El número dos del gobierno estuvo este miércoles en la presentación de un libro en un acto desarrollado en las oficinas de la Vicepresidencia. Choquehuanca “estuvo sin barbijo bastante tiempo” en un salón lleno de personas. Los periodistas locales calculan que había al menos 500 individuos.
Todo ello generó malestar. Por ejemplo, el diputado Alberto Astorga, de Comunidad Ciudadana, le envió una carta a Choquehuanca en la que le exigió que se vacune contra el COVID-19. “Le pedimos también que pueda facilitarnos las pruebas necesarias de que usted se ha vacunado”, señaló en la misiva.
Luego manifestó que, pese a “las falencias del plan de vacunación ejecutadas por el gobierno, una parte de la población ya está colocándose la tercera dosis de la vacuna, y tenemos entendido que usted no tiene ni la primera. Nos parece una irresponsabilidad de su parte, ya que no sólo usted corre el riesgo de contagiarse, también pone en riesgo a la ciudadanía”, continuó.
En el escrito, el legislador también recuerda que el próximo sábado 1 de enero entrará en vigencia el decreto 4641, que “establece la obligatoriedad de portar el carnet de vacunación como requisito para ingresar a espacios públicos”. Y lo invita al vicepresidente a que, “para incentivar la población a vacunarse, por el bien de la salud pública, es importante que nosotros, las autoridades electas por el voto ciudadano de los diferentes Órganos del Estado actuemos con el ejemplo en todo momento y más aún cuando los contagios se incrementan en el país”.
En Bolivia aseguran que la presión contra Choquehuanca también viene desde el interior del Movimiento Al Socialismo (MAS) y sus sectores afines; y citó como ejemplo el pedido de Juan Carlos Huarachi, ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), quien le solicitó al vicemandatario que se inmunice. En tanto, el diputado Héctor Arce, cercano del ex presidente Evo Morales, hizo el mismo reclamo.
Distintos grupos de personas que se oponen a las vacunas marcharon en las últimas horas en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.
El martes, un grupo se acercó a un punto de vacunación en la ciudad de El Alto, amenazó con destruir dosis, protestó, y agredió a personal de salud y a quienes estaban en el recinto.
En tanto, otros grupos se concentraron en las plazas principales de las ciudades de Santa Cruz y Cochabamba. En la capital cruceña, un médico dijo que la vacuna incrementa los efectos de la enfermedad. “La finalidad de la vacuna es evitar las muertes, pero igual tenemos que utilizar barbijos y alcohol. ¿Qué finalidad tiene inmunizarte si de igual manera tendrás que cuidarte?”, se preguntó.
En la plaza 14 de Septiembre, de Cochabamba, se produjo otro reclamo. En este caso la movilización fue contra el decreto que entrará en vigencia el 1 de enero. El grupo se manifestó contra la presentación del carnet de vacunación y exigió que, si es que el Gobierno pedirá la presentación de una prueba PCR negativa, esta se haga de manera gratuita.