La dirección nacional del gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) se opuso este jueves a que su bancada en el Parlamento boliviano apruebe la ley sobre el censo que ponga fin a las protestas en Santa Cruz, la mayor región del país, en paro desde hace 34 días.

En un comunicado, el MAS, organización que lidera el expresidente Evo Morales, manifestó que "no es necesario" aprobar ninguna ley del censo, ya que la "derrota" de los sectores cívicos y líderes de Santa Cruz, a los que tildó de "fascistas y logieros", debe ser "clara".

En la víspera, los líderes cruceños aceptaron que el censo se realice en 2024 al considerar que su propuesta para que sea en 2023 ya no es sostenible "técnicamente", pero sí insisten en la aprobación de una ley que dé certidumbre sobre la aplicación oportuna de los datos oficiales para la distribución de recursos y escaños parlamentarios.

El MAS sostuvo que la huelga en Santa Cruz "está agonizando" y consideró que lo único que queda a quienes la impulsaron es "hacer acuerdos y maniobras" para reflejar una "supuesta victoria" con la aprobación de una ley censal.

"Que su paro indefinido agonice y se muera sin que hayan conseguido nada", expresó el partido de Gobierno.

También advirtió que dentro del MAS existen legisladores "dispuestos a aliarse con la derecha con tal de conseguir prebendas y beneficios" y que la posible aprobación de la ley servirá para que en Santa Cruz se presente la huelga como una "supuesta victoria".

ATASCO EN EL LEGISLATIVO

El presidente de la Cámara de Diputados, el oficialista Jerges Mercado, convocó para este jueves en la tarde a una sesión del pleno con miras a aprobar una ley sobre el censo.

La discusión en el plenario no ha comenzado, pues la Comisión de Constitución aún trabaja en una versión final de un solo proyecto de ley.

La aprobación del proyecto depende de los legisladores del MAS, partido en el que existen dos posturas, una que considera que una ley solucionará el conflicto por el censo y otra, la cercana a Evo Morales, que sostiene que basta con el decreto aprobado por el presidente Luis Arce.

La dirección del MAS pidió al Gobierno de Arce que "tome las medidas necesarias para hacer justicia y castigar" a los autores "materiales e intelectuales" de los hechos de violencia que hubo en varias de las jornadas de paro.

A juicio del oficialismo, la huelga tuvo propósitos de "subversión y conspiración" para "debilitar políticamente al Gobierno, generar una crisis nacional y forzar la renuncia" de Arce, aunque los sectores cruceños no hicieron ese pedido.

El Gobierno fijó el censo para este mes, pero en julio lo postergó para 2024 argumentando "problemas técnicos y la necesidad de "despolitizar" el proceso, lo que provocó la protesta sobre todo en Santa Cruz.

Arce anunció hace unos días que la nueva fecha del empadronamiento es el 23 de marzo de 2024 y que en septiembre de ese año se presentarán los datos finales para la nueva distribución de recursos y la renovada asignación de escaños parlamentarios.