Los indígenas marchistas que se encuentran en la ciudad de Santa Cruz, participarán este lunes de las movilizaciones que fueron convocadas por el bloque de unidad, que reúne a opositores y algunos gremios, en rechazo a la aprobación del proyecto de ley contra la legitimación de ganancias ilícitas que está en tratamiento en la Asamblea Legislativa.

El cacique Marcial Fabricano aseguró que su sector participará de esa movilización, en contra de las acciones que lleva adelante el gobierno de Luis Arce.

“Respetuosamente creo que corresponde que tengan y merezcan todo el respaldo del pueblo porque ya está colmando la situación de cómo estamos siendo conducidos y gobernados los bolivianos. Vamos a participar en buena parte de la jornada, como fuerza, como demostración a la desatención del Gobierno”, afirmó Fabricano.

Los indígenas marchistas llegaron a la ciudad de Santa Cruz hace más de una semana, luego de una caminata de 37 días entre Trinidad y la capital oriental. Ellos demandan la atención del Gobierno.

A lo largo de la semana pasada, no lograron reunirse con Arce ni con el vicepresidente David Choquehuanca, a quienes quieren plantearles sus demandas en forma directa, no a sus ministros ni viceministros.

El Parlamento Indígena convocó al Gobierno a debatir la agenda 21-25 que contempla al menos 14 puntos: tierra y territorio, fondo indígena, escaños especiales, eliminación de normas que afectan a pueblos indígenas, autonomía indígena, auditoría al exfondioc, educación, salud, administración de justicia indígena, pacto fiscal, ley de amazonia, límites TIPNIS, cumplimiento del acuerdo Escazú y censo 2022.

Al margen de esa agenda, Fabricano consideró que los indígenas pueden “hacer algo por los bolivianos” desde la ciudad de Santa Cruz, a través de la movilización de este lunes.

El bloque de unidad convocó para este lunes a un paro nacional con bloqueo de caminos. Sólo las alcaldías del eje central del país confirmaron su participaron, al igual que la Gobernación de Santa Cruz, los gremialistas y médicos del país, parte del sector del transporte público y los cívicos potosinos.

El Gobierno, el Movimiento Al Socialismo (MAS) y sus sectores sociales afines rechazaron la movilización de este lunes, por considerar que se busca desestabilizar al gobierno de Arce y porque dejará grandes pérdidas económicas.