Cochabamba, junio de 2025 – El actual alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, no enfrenta en la actualidad ningún proceso penal pendiente ni condena ejecutoriada en el Estado boliviano.
Todos los procesos iniciados en su contra durante los gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS) han sido cerrados, archivados o anulados, luego de años de litigios en el país y ante organismos internacionales.
Reyes Villa denunció en su momento ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) haber sido objeto de una persecución política sistemática.
Según su declaración, los gobiernos de Evo Morales articularon más de 20 procesos judiciales con el objetivo de inhabilitarlo políticamente, obligándolo al exilio durante más de una década.
"Fui víctima de una persecución judicial orquestada para eliminarme políticamente. La CIDH analizó el caso y se demostró que todos los procesos eran montajes sin sustento legal", señaló Reyes Villa en declaraciones pasadas. Su equipo jurídico presentó abundante documentación ante organismos internacionales y logró la admisión del caso en la CIDH, lo cual aceleró la revisión y extinción de las causas en Bolivia.
En los últimos años, el Tribunal Supremo de Justicia y diversas instancias judiciales nacionales revisaron los fallos y anularon las sentencias en su contra por vulneración de garantías constitucionales, falta de debido proceso y prescripción de causas.
La defensa del alcalde reiteró que ninguna de las acusaciones estaba basada en actos reales de corrupción, sino en decisiones administrativas comunes durante su gestión como prefecto del departamento de Cochabamba entre 1997 y 2006.
Hoy, Reyes Villa ejerce libremente sus derechos políticos y no tiene ningún impedimento legal para postularse a cargos públicos.
Esta situación ha sido destacada por varios sectores como una muestra de que la justicia boliviana puede enmendar errores del pasado, aunque aún persisten cuestionamientos por la utilización del sistema judicial con fines políticos.