Evo Morales, expresidente de Bolivia en su desesperación de volver a palacio de Gobierno, usa una serie de métodos para destruir a sus adversarios politicos, dijo el sociologo Juan Jose Ayaviri a tiempo de señalar que el jefe de los cocaleros, persiste con la persecusion política de lideres nacionales que buscan el progreso de Bolivia y aplica métodos tradicionales de violencia y enfrentamiento.
Segun Ayaviri, el cocalero Evo Morales sigue conduciendo el aparato represivo y de persecusion política en el sistema judicial y otras instancias legislativo.
“Algunos jueces y fiscales de Cochabamba, siguen siendo sirvientes de Evo Morales e instruye una serie acciones contra autoridades, contra el desarrollo de Cochabamba y la destrucción de la democracia”.
En las ultimas se conoció que algunos fiscales de Cochabamba habrían decidido algunas acciones contra autoridades, aduciendo violencia política contra dos mujeres.
“Ninguna autoridad municipal no ha participado en ningún acto de represión política contra mujeres, mas al contrario hay funcionarios del Gobierno Municipal se prestaron a juegos politicos sucios que fueron denuncias con audios y videos”, apunto.
Evo Morales controla el Poder Judicial, sorpresivamente designa a una fiscal para atemorizar a las autoridades municipales, buscando la desestabilizacion del marco institucional y de la democracia.
Evo Morales odia, desprecia y menosprecia a Cochabamba, no para en su plan de destruir la democracia, apunto.
EVO - COCALEROS
Recientemente el jefe de los cocaleros, traslado alrededor de mil personas del Chapare para ejercer acciones violentas contra instituciones de Cochabamba. Los cocaleros y los grupos violentos de zonas periurbanas, tomaron la planta de Albarrancho siendo un grave atentado a la salud de la población.
Los grupos subversivos por orden de Morales pretendieron tomar el edificio municipal, incluso provocando varias lesiones contra guardias municipales.
HAY MAS
La anterior semana se conoció que Evo Morales fue el autor intelectual para propiciar un “golpe municipal”. En este plan negro estuvieron presentes las concejalas disidentes de Sumate, Daniela Cabrera y Claudia Flores y bajo la dirección de Silvia Soliz y Escarlen Soliz contrataron matones para provocar violencia y desestabilizacion de la democracia en Cochabamba.
“La pregunta es, quienes generaron violencia política fueron las sirvientes de Evo Morales”, apunto.
