Copa señaló que en la historia del país nunca se había visto una marcha por una candidatura presidencial ni por la soberbia de una sola persona. Como autoridad legítimamente establecida, afirmó que su deber es resguardar la seguridad de los alteños, ante lo que considera la capacidad de Morales para lograr su objetivo.
La alcaldesa también instó al presidente Luis Arce a defender al pueblo que le dio su apoyo electoral. “El alteño no va a derramar ni una gota de sangre más por los apetitos de una persona. No lo vamos a permitir, y eso se ha decidido en la Asamblea de la Alteñidad”, declaró a Cadena A.
Copa explicó que han solicitado al gobierno que detenga la marcha y que los manifestantes regresen a su lugar de origen, ya que los alteños no quieren confrontación. Aclaró que este es un problema interno del partido de Morales, en el cual la ciudadanía no tiene nada que ver.
Además, anunció que El Alto y sus diferentes organizaciones sociales se concentrarán en un punto estratégico de la ciudad para esperar la marcha y vigilar que el gobierno cumpla con su deber legal.
Según la alcaldesa, Morales está jugando su "última carta", que consiste en asegurar la elección de Andrónico Rodríguez como presidente del Senado, y, una vez depuestos Arce y Choquehuanca, asumir la presidencia interina y legalizar la candidatura de Evo Morales.
Copa advirtió que Morales podría usar el aparato estatal, "con fraude o cualquier mecanismo", para ser reelegido presidente, lo que "convertiría a Bolivia en otra Venezuela y nadie va a sacar al señor Morales del poder porque él está acostumbrado al poder. Necesita el poder, y este lo está haciendo delirar”, advirtió.
Lamentó la falta de autoridad del gobierno para hacer cumplir una resolución de Acción de Cumplimiento que prohíbe a Morales realizar la marcha junto a sus seguidores, afectando la circulación normal en las carreteras.