El Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) celebra hoy 66 años de la revolución nacional del 9 de abril de 1952. A nivel nacional, el MNR celebra esta fecha sin un líder visible tras la caída de su último jefe nacional y ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada en octubre de 2003.
La Revolución boliviana de 1952, conocida como Revolución del 52, fue un proyecto político liderado por el partido denominado Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y que, en alianza con liberales y comunistas, pretendió implantar un nuevo modelo socioeconómico en Bolivia.
Tuvo como figuras principales a los presidentes Víctor Paz Estenssoro y Hernán Siles Zuazo. El gobierno del MNR luego de esta Revolución duró desde el 9 de abril de 1952 hasta el golpe de estado del 4 de noviembre de 1964.
En estos doce años, hubo un cogobierno y a la vez pugna de poder entre el partido y los sindicatos obreros, aglutinados principalmente en torno a la Central Obrera Boliviana (COB).
La Revolución del 52 amplió la cobertura del derecho al voto en Bolivia, la distribución de tierras –a través de una controversial reforma agraria con no pocas expropiaciones violentas y control del Estado sobre los recursos naturales y la economía boliviana. Además, incorporó a la vida política al sector campesino y femenino al establecer el voto universal. Fue una Revolución política que en su momento se equiparó a la Revolución mexicana y que antecedió a la Revolución cubana. Se desarrolló en el contexto de la Guerra Fría y fue la única de las revoluciones sociales de América Latina que contó con el apoyo de los Estados Unidos.
Ideológicamente, la Revolución del 52 se nutrió de varias corrientes de pensamiento, principalmente en torno al MNR. Por un lado, el partido del MNR, cuyos principales pensadores fueron Carlos Montenegro y Augusto Céspedes, tuvo influencia de los nacionalismos europeos: desde Oswald Spengler hasta Benito Mussolini.
Esto explica que en los años cuarenta el partido haya tenido una influencia fascista y antisemita. Posteriormente, el MNR se nutrió de influencias marxistas debido a sus alianzas estratégicas con otros grupos comunistas, como el Partido de Izquierda Revolucionaria (PIR).
Finalmente, después de haber obtenido el poder y probar unos primeros años de relativa estabilidad en el gobierno, el partido derivó en una democracia liberal al estilo de las potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial, llegando en los años ochenta con el presidente Víctor Paz Estenssoro a lo que algunos denominan neoliberalismo.
Sin embargo, el impacto más importante de la Revolución del 52 fue haber incorporado el indigenismo al debate sociopolítico hegemónico. Esta corriente de pensamiento, cuyo principal exponente fue el filósofo Franz Tamayo, sostenía que el indígena estaba excluido de la vida civil y que debía incorporársele adaptándolo a modelos europeos de integración social, comenzando por la cobertura de la enseñanza educativa.
Esta apertura a nuevas ideologías abriría posteriormente espacios para otras corrientes más radicales, como el indianismo, del filósofo anticristiano Fausto Reinaga en los años setenta, o el Movimiento Al Socialismo (MAS), liderado por el dirigente cocalero Evo Morales en la primera década del 2000.
El desarrollo de la Revolución del 52 cubre tres periodos presidenciales. Durante el primer gobierno de Víctor Paz Estenssoro (1952-1956) se realizaron los cambios más significativos como ser el voto universal, la fundación de la Central Obrera Boliviana, la disolución y reforma del ejército, y la nacionalización de las minas entre abril y octubre de 1952. En agosto de 1953 se decretó la reforma agraria y en 1955 se aprobó el nuevo Código de la Educación que dio inicio a la reforma de la educación. En 1955 también se aprobó el nuevo Código Petróleo que permitía el acceso de empresas extranjeras a la exploración y explotación petrolífera.
En el segundo gobierno del MNR, Hernán Siles Zuazo (1956-1960) tuvo que enfrentar la inflación causada en parte por las reformas durante el gobierno de Paz Estenssoro y llevar a cabo el primer plan de estabilización a través de convenios con el Fondo Monetario Internacional. Durante este período se incrementó el desarrollo agrícola y el tercer gobierno del MNR, fue el segundo período presidencial de Paz Estenssoro (1960-1964) en el que se dedicó a reformar la recientemente creada Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) (ver abajo), construir infraestructura y consolidar la llamada "Marcha al Oriente."
El primer impacto económico de la Revolución del 52 sobre la economía fue la inflación. Por una parte, el incremento en la emisión de moneda del Banco Central de Bolivia para proveer de capital de trabajo a COMIBOL y el creciente incentivo a re-exportar las importaciones (porque para ellas había una tasa de cambio preferencial que cada vez distaba más de la tasa de cambio en el mercado negro) iniciaron la inflación.20 Por otra, la caída del 13 % en la producción agrícola entre 1952-54 y la desorganización de los sistemas de distribución de bienes agrícolas, resultó en un incremento en los costos de artículos alimenticios importados, entre otros, aumentaban aún más la inflación. El costo de vida en La Paz incrementó a una tasa promedio anual del 146,6 % entre 1952 y 1956.21 Por tanto, el primer gobierno del MNR estuvo signado por la inflación y la caída del producto debido al decremento en la producción de minerales y de productos agrícolas y ésta solo fue parcialmente contrapuesta por la expansión de la industria petrolífera.